Tu Nueva Vida en Cristo

Muchas felicidades! Haber hecho a Jesús tu Señor y Salvador es seguramente la mejor decisión que has podido tomar en tu vida. ​A partir del momento en que le das a Jesús un lugar en tu corazón y decides creer en Su Nombre, das inicio a una nueva vida y legítimamente te conviertes en hija de Dios. Así lo afirma las Escrituras, en el libro de Juan 1:12. Te sentirás diferente y notarás que tus pensamientos y actitudes comienzan a cambiar, porque recibir a Jesús, te llenará de alegría, de paz y de gozo, y te concederá grandes privilegios.

El nuevo nacimiento que recibes a partir de hacer tu confesión de fé, es una obra de Dios mismo. No existe ningún esfuerzo humano que pueda acercarte a Él, esto que ahora vives es un regalo de Dios. No tienes que pagar nada por haber recibido la salvación, pues Jesús mismo pagó el precio en la cruz del calvario por amor y por gracia.
La palabra "gracia", que significa favor inmerecido, expresa la bendición que el Señor nos ha dado al salvarnos; un favor que no podríamos ganar por nosotras mismas. Dios no requiere buenas obras como pago por este don maravilloso de la salvación, para que nadie pueda afanarse y decir en su corazón "soy muy buena persona y tengo derecho de entrar al cielo". Todas las buenas obras que hagas a partir de hoy, serán únicamente para agradar y glorificar a Aquel que te salvó, y no para ser merecedora de ese regalo.
En la Palabra de Dios, podrás leer sobre las bendiciones y promesas que recibes luego de tu decisión de reconocer a Jesucristo como tu Señor y Salvador. Te aconsejamos buscarlas en la Biblia, y meditar en ellas constantemente.
Conozcamos entonces algunos de los regalos concedidos:

1. Te has convertido en una nueva criatura. Esta maravillosa promesa está en la segunda carta a los Corintios 5:17: "De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas". ¡Eres una nueva creación en Jesús!
2. Dios ha perdonado TODOS tus pecados, pues en Cristo hemos sido justificados. Isaías 43:25 "Ha borrado tus rebeliones por amor de Él mismo, y no se acordará nunca más de nuestros pecados".
3. Ahora eres Hija de Dios. Has sido adoptada por el Padre Celestial, quien es amoroso y se ocupará de ti y tus necesidades. Mateo 6:9-13 nos dice que Dios no es como un padre humano, Él ve todo, escucha todo, sabe todo, está en todas partes y te conoce mejor que tú mismo. Te ama con amor eterno.
4. El Espíritu Santo mora dentro de ti y promete que te guiará a toda verdad, todos los días de tu vida. Jesús mismo lo afirma en el evangelio de Juan 16:7-13.
5. Nunca más estarás sola. Jesús mismo te lo asegura cuando dice: "Estaré con ustedes siempre, hasta el fin del mundo". (Mateo 28:19-20). Él es verdadero y Su palabra permanece por la eternidad.
6. Irás al cielo. Puedes estar segura de ello. Esa es la razón por la que Cristo murió, y en ese sacrificio El abrió un camino al Padre para ti, porque Él es el único camino, la verdad y la vida. Juan 14:6
7. Tienes un manual, una guía, una lámpara que alumbrará tu camino en todas las páginas de Biblia, en donde encontrarás una guía para conducirte en tu nueva vida y en situaciones específicas. Léela y tu fe crecerá.
8. Jesús te hace perfecta. Desde el momento que recibes a Jesús en tu corazón, Dios ya no te ve a ti, sino ve la perfección de Su hijo en ti. Jesús te justifica ante Dios y te da acceso directo al Padre. Sólo Jesús puede hacerte feliz!

Como ves, grandes son Sus obras y Sus maravillas para cada una de nosotras. Dios envió a Su hijo para redimirnos y para hacernos sus hijas y herederas.
​Ahora nos corresponde acercarnos cada día más a Dios para agradecerle, amarle y servirle!

POR TANTO, YA NO ERES SIERVA, SINO HIJA;
Y SI HIJA,
TAMBIÉN HEREDERA POR MEDIO DE DIOS."
GÁLATAS 4:7